Bilbao es un rompecabezas. El desordenado crecimiento de la Villa la hace única en el mundo, en cada zona descubrirás una personalidad propia y diferenciada. En el corazón de Bilbao encontrarás el Casco Viejo de la ciudad, el cual sigue latiendo con fuerza. Nada como perderse en esta zona señorial, degustando vinos y pintxos, visitando sus emblemáticos negocios. Un precioso paseo por la ría a pie o en barco, donde te irás encontrando con el contraste entre el nuevo y moderno Bilbao, admirando el Guggenheim, el Puente de Calatrava, Palacio euskalduna, Teatro Arriaga, Puente de Portugalete etc…,. No podemos olvidarnos tampoco del Mercado de la Ribera, el mercado de abastos cubierto más grande de Europa, lo que demuestra la importancia gastronómica de este lugar. Todas estas piezas componen la magia de un mosaico de planes para disfrutar.

De estilo neoclásico y con forma rectangular, consta de 18 arcos en dos lados y, 15 en los otros dos.  Se construyó a mediados del siglo XIX y es el referente del Casco Viejo. En sus soportales puedes encontrar algunos de los mejores restaurantes y bares de pintxos de Bilbao. Una curiosidad: la Plaza Nueva se iba a llamar Plaza de Fernando VII, e iba a llevar una estatua ecuestre del monarca en el centro. El rey murió durante la construcción de la misma, así que los bilbaínos ignoraron sus peticiones y dedicaron la plaza al pueblo. Es un punto de obligada visita en el que descubrirás uno de los lugares que más quieren los bilbaínos.

El símbolo de la ciudad, el Museo Guggenheim Bilbao constituye uno de los proyectos culturales más ambiciosos del siglo XX. Es un museo de arte contemporáneo diseñado por el arquitecto canadiense Frank O. Gehry. Su colección permanente incluye obras de los artistas más importantes de las últimas cuatro décadas. Además, organiza interesantes exposiciones. Después de empacharte de arte podrás hacer lo mismo con unos buenos pintxos. La terraza del museo tiene unas sorprendentes vistas de Bilbao, que maridan con la gastronomía local de su restaurante. No te olvides del museo de Bellas artes de Bilbao, una de las mejores pinacotecas de la península.

Un plan para descubrir la historia de Bilbao y su arquitectura desde otra perspectiva, o bien para sorprender a tus compañeros, es hacerlo a través de un barco por su famosa Ría. Los barcos salen desde el centro donde podrás admirar el Guggenheim, pasando por Zorrozaurre o el Puente de Portugalete. Los paseos duran una hora por el centro o dos, si prefieres hacerlo hasta el mar. Además, algunos billetes te permiten bajar y subir cuantas veces quieras en el mismo día, una forma diferente de ver la ciudad y los pueblos colindantes hasta la costa.

El Mercado de la Ribera esta en las 7 calles, próximo al Puente de San Antón. Cómo dato curioso caber destacar que, en 1990, fue galardonado con el Record Guinness por ser el Mercado Municipal de Abastos más completo y, el mayor mercado cubierto de Europa. El Mercado de la Ribera, fue construido en 1929 y, es obra del arquitecto Pedro de Ispuzúa. Una especie de barco anclado junto a la ría, en el que se pueden adquirir todo tipo de delicias en sus 59 puestos, además de desayunar, comer en sus restaurante, tomar un brunch, pintxos o raciones, e incluos dejar tu compra para que los cocineros te la preparen. Todo ello acompañado de una interesante y atractiva oferta de actividades culturales como exposiciones, desfiles, proyecciones de cine